Desde la Antigüedad, tanto en la India como en China y en las iglesias occidentales, se ha utilizado el incienso en los templos para purificar. En el Antiguo Egipto se empleaba para hacer mascarillas faciales rejuvenecedoras, cosméticos y perfumes debido a su gran poder activador.
Es adecuado para la meditación, une cuerpo y mente en una sola energía, a la vez que favorece la estabilidad emocional, dando coraje y combatiendo los estados de ansiedad.
A nivel cosmético tiene múltiples propiedades: antiinflamatorias, antiirritantes, inmunoestimulantes y astringentes. Es ideal para el tratamiento de pieles envejecidas y también para el tratamiento de las pieles grasas.
Este Aceite Esencial tiene propiedades cicatrizantes y regeneradoras.
Modo de uso:
- Uso tópico.
- Perfume para diluir en una base portadora.
- Recomendación màx: 1% (uso facial) y 3% (uso corporal).