Con dos limas de distinta granularidad. Apto para diabéticos.
La piel de los pies se reseca, los talones se agrietan, se forman callosidades. La lima-raspador es un instrumento que elimina con suavidad esas dolorosas y horribles callosidades, sin ningún riesgo de corte.
Sus 27 centímetros de tamaño y su largo mango permiten una utilización fácil y rápida.
El raspacallos tienes dos caras abrasivas de distinto color:
- Cara de grano grueso para las callosidades.
- Cara de grano fino para el acabado.
El raspacallos es más eficaz que las piedras y menos agresivo que los raspadores metálicos. Es higiénico y no provoca riesgo de heridas o cortes por lo que está perfectamente adaptado para los diabéticos.
Usar en seco. Lavable.